Manuel es uno de esos héroes sin capa que sin quererlo se ha hecho viral. Una foto vale más que mil palabras, pero la suya está dando mucho que hablar. Sentado en plena acera, con un pie descalzo y sudoroso, y rodeado de bombonas de oxígeno. El bombero, completamente agotado, no puede ni levantar la mirada. Así lo vemos tras luchar sin descanso contra el fuego en los dos incendios que hace unos días han asolado Jaén, pero la historia detrás de la foto es mucho más.

Manuel y sus compañeros han estado varios días sin pisar ni el cuartel, ni su casa. Las llamas que han arrasado una fábrica de molduras y una planta de papel les tuvieron más de 24 horas trabajando sin descanso. Ahora ya, más relajado pero sin ser consciente aún de la repercusión de su foto, Manuel cuenta a NIUS como vivió la situación:

"En momentos de tanta tensión te aíslas, sigues trabajando y vas funcionando durante horas, pero sin pensarlo, hasta que ya no puedes más". Llego un momento en el que tuvo que descansar.

"Me notaba con los pies encharcados, y le pregunté a mi compañero si estaba igual." No era agua lo que tenía en sus botas, sino sudor. "En la foto se me ve estrujando el calcetín, no podía más, eran chorros y chorros". Manuel se fue deshidratando poco a poco.

Manuel estuvo trabajando a más de 300 grados de temperatura, así que estar sentado a 45 grados para él era como si nada. "El problema fue que me había dado un corte de digestión y no me encontraba bien, pero aún así seguí adelante". Manuel no quería el relevo de sus compañeros, solo pensaba en apagar las llamas.

En la parte alta de la nave de la fábrica de papel, el fuego alcanzó los 600 grados de temperatura y a eso hay que sumar los más de 25 kilos que pesan sus trajes. "Se me enganchaba la botella entre cables, era una fábrica, no podía tirar de ella." "A pesar de llevar equipación, te quema. Es una sensación muy difícil de explicar".

Tras dos días de lucha, los bomberos de Jaén han hecho una reflexión en redes sociales. “Seguimos luchando. Seguimos aprendiendo. Seguimos mejorando”. Es el mensaje que acompaña a la foto de Manuel. Ni el ni sus compañeros se consideran héroes. “Han sido unos días duros para Jaén, hemos dado el ‘do de pecho’".