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Un hombre de 82 falleció en la madrugada de este jueves en el incendio originado, al parecer, por un cortocircuito, en la sala de estar de su casa situada en la pedanía lorquina de La Pulgara. La otra moradora de la vivienda, de 65 años, fue atendida por inhalación de humo y un vecino de 54 años, que trató de ayudarlos, sufrió heridas leves.
Un testigo de los hechos, Francisco Reverte, que vive a escasos metros de la casa incendiada, relató a LA VERDAD que se despertó a las 2.45 horas por el insistente sonido de la alarma de la casa de su vecino y vio «humo negro» que procedía de una de las ventanas.
Cuando llegó al lugar de los hechos ya estaban allí otros dos vecinos que con una manguera intentaban sofocar el incendio. «Salvaron la vida de la mujer» porque hicieron que el agua llegara hasta el dormitorio en el que ésta se encontraba y donde el ambiente comenzaba a ser ya irrespirable por el denso humo. «Le dijimos que cerrara la puerta de su habitación, que no intentara salir para que no se asfixiara», mientras aguardaban la llegada de los bomberos.
Relató la angustia que sintieron porque «no podíamos abrir la puerta con ninguna de las llaves del llavero que nos tiró la mujer por la ventana». Los bomberos «llegaron enseguida» y con un marro reventaron la puerta y la sacaron con vida.
La parte inferior de la vivienda, ubicada en el paraje de Puente Alto, es utilizada como almacén agrícola y una de las trabajadoras no pudo contener las lágrimas al llegar a su puesto y conocer que su jefe había fallecido.
El incendio movilizó a Policía Local, guardias civiles, bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento de la Región de Murcia (CEIS) y ambulancias con personal sanitario de la Gerencia de urgencias y Emergencias Sanitarias 061.
A su llegada, los servicios de emergencia rescataron a los dos ocupantes de la vivienda, uno de los cuales ya se encontraba en parada cardiorrespiratoria y los sanitarios no pudieron hacer nada por salvarle la vida. La otra moradora fue atendida por inhalación de humo y trasladada al hospital Rafael Méndez de Lorca.